“No
puedes ser feliz, a menos que seas desgraciada alguna vez” Delirium
BIOGRAFÍA
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DOLORES VEINTIMILLA DE GALINDO |
Dolores Veintimilla de Galindo
fue una poeta ecuatoriana. Nació en el año 1829 en Quito y falleció el 23 de
mayo de 1857 en Cuenca.
Hija de don José Veintimilla y
de doña Jerónima Carrión, pertenecía a una familia aristócrata y recibió una
esmerada educación, estudió en el Colegio Santa María del Socorro y más tarde
en el Convento de Santa Catalina de Siena. Estudió música, sabía tocar el piano
y la vihuela; recibió clases de dibujo y pintura. Empezó a escribir poesías
desde muy joven.
Al cumplir sus 18 años contrajo
matrimonio en Quito con el médico colombiano Dr. Sixto Galindo, y antes de
finalizar el año nació su hijo al que llamó Felipe Santiago José. Poco tiempo
después, por razones de la profesión de su esposo se trasladaron a vivir en
Guayaquil, y posteriormente se radico sola con su hijo en la ciudad de Cuenca. Abandonada
y buscando alivio a su dolor, se refugió en el arte, dedicándose a la pintura,
la música y la poesía.
Es reconocida como una de las
más elevadas voces de nuestra poesía, la mayor del romanticismo, por ser la
primera mujer que luchó contra la pena de muerte en el Ecuador, así como una de
las primeras defensoras de la clase indígena.
En su corta vida, fue creadora
de inspirados poemas y obras en prosa. El fracaso en su matrimonio y su
pensamiento avanzado para la época, marcarían su vida y su obra literaria.
Fue una luchadora, pese a ser
acosada por los prejuicios sociales, los roles, el machismo, la violencia, ella
hizo de su vida una vocación literaria. En su corta vida fue creadora de
inspirados poemas y trabajos literarios, el poema que más se le conoce es
Quejas. Generacionalmente Dolores inauguró el romanticismo en el Ecuador,
cerrando el neoclasismo.
El 20 de abril de 1875 fue
ajusticiado el indígena Tiburcio Lucero. Dolores escribió una nota en la que
criticaba la pena de muerte aplicada a Tiburcio. A partir de esta carta, se
ganó enemigos que la calumniaron. La presión fue tanta (antes el esposo la
había abandonado) y vencida por las
penas y los fracasos Dolores optó por el suicidio.
OBRAS
Dolores Veintimilla murió a los
veintiocho años y dejó: nueve poemas y tres textos en prosa, una escasa
cantidad de obras ya que quemó la mayor parte de lo que había escrito. Las que
quedaron fueron publicadas en conjunto por Celiano Monge, después de la muerte
de la poeta.
Su poesía, de tinte romántico
según la corriente imperante en ese momento, respeta las reglas poéticas pero
sin emplear metáforas. De manera clara y directa muestra sus sentimientos y
pensamientos que son los de una mujer triste y frustrada por el fracaso de su
matrimonio y por los sueños perdidos.
Su poema más destacado es:
QUEJAS
¡Y amarle pude! Al sol de la
existencia
se abría apenas soñadora el alma…
Perdió mi pobre corazón su
calma
desde el fatal instante en que
le hallé.
Sus palabras sonaron en mi oído
como música blanda y deliciosa;
subió a mi rostro el tinte de
la rosa;
como la hoja en el árbol
vacilé.
Su imagen en el sueño me
acosaba
siempre halagüeña, siempre
enamorada;
mil veces sorprendiste, madre
amada,
en mi boca un suspiro
abrasador;
y era él quien lo arrancaba de
mi pecho;
él, la fascinación de mis
sentidos;
él, ideal de mis sueños más
queridos;
él, mi primero, mi ferviente
amor.
Sin él, para mí el campo
placentero
en vez de flores me obsequiaba
abrojos;
sin él eran sombríos a mis ojos
del sol los rayos en el mes de
abril.
Vivía de su vida apasionada;
era el centro de mi alma el
amor suyo;
era mi aspiración, era mi
orgullo…
¿Por qué tan presto me olvidaba
el vil?
No es mío ya su amor, que a
otra prefiere.
Sus caricias son frías como el
hielo;
es mentira su fe, finge
desvelo…
Mas no me engañará con su
ficción…
¡Y amarle pude, delirante,
loca!
¡No, mi altivez no sufre su
maltrato!
Y si a olvidar no alcanzas al
ingrato,
¡te arrancaré del pecho,
corazón!